El día 1 de febrero, el mismo día de la presentación de la Rueda Rotaria, los Clubes de la ciudad de Alicante plantaron una encina en la Universidad de Alicante sede del Club Rotaract, como símbolo de las raíces de la relación y el continuo crecimiento de la armonía entre ellos.
Es un gesto de agradecimiento a lo que nos da la naturaleza, con una mirada sostenible hacia los demás y como manifestación de amor al entorno. Hay un dicho popular que aquellos que planten un árbol serán recompensados cada vez que una persona coma su fruto o repose bajo su sombra.
La encina es uno de los árboles que están más presentes en nuestras culturas que le han incluido como árbol sagrado, símbolo de longevidad, solidez, justicia y fuerza.
A la ceremonia de la plantación que estuvo presidida por el Gobernador del Distrito, asistieron autoridades académicas y un gran número de rotarios de la ciudad.